Sí, con supervisión y adaptación, el ejercicio puede ser seguro y beneficioso incluso durante la quimioterapia, radioterapia o después de la cirugía.
Una combinación de entrenamiento aeróbico, fuerza y flexibilidad, adaptado a tus capacidades y estado de salud.
Generalmente, se recomienda realizar actividad física varias veces a la semana, empezando poco a poco y aumentando gradualmente según tolerancia hasta lograr las recomendaciones de la OMS semanales (2-3 días de fuerza y 300 minutos de actividad cardiovascular de intensidad moderada).
No si se ajusta a tus condiciones; puede incluso ayudar a reducir fatiga, mejorar el ánimo y fortalecer el cuerpo.
Sí, siempre se recomienda una evaluación médica, idealmente en Cardiología y Oncología, para diseñar un plan seguro.
Sí, mejora la fuerza, la resistencia, la movilidad, la salud cardiovascular y el bienestar general.
Algunos movimientos pueden estar limitados según cirugía, radioterapia o efectos secundarios; se adaptan de manera personalizada.
No, si se planifica correctamente. Puede incluso mejorar la tolerancia a ciertos tratamientos y la calidad de vida.
No necesariamente; el plan de entrenamiento en el centro está diseñado para que puedas realizarlo de forma segura tanto en casa como en gimnasios, con o sin equipamiento básico, siguiendo las indicaciones de los profesionales.
El equipo de educadores físicos realizará una revisión de sintomatología diaria para asegurarse de que estás en condiciones adecuadas para entrenar. En caso contrario, detendrán la actividad y te derivarán al equipo médico.
Cada tratamiento tiene efectos distintos, pero con apoyo médico y planificación se pueden manejar los cambios en energía, apetito, sueño y actividades cotidianas.
Fiebre, dolor intenso, sangrados, mareos, falta de aire o cualquier cambio inusual deben notificarse de inmediato para recibir atención oportuna. Igualmente, estos síntomas serán revisados diariamente en las sesiones de entrenamiento.
Con orientación de nutrición especializada, adaptando la dieta a tus necesidades y tolerancia, se puede mantener fuerza, energía y peso saludable.
Sí, los cambios emocionales son frecuentes. Existen recursos de apoyo psicológico y grupos que ayudan a manejar estrés, miedo o tristeza. Nosotros podemos orientarte y ayudarte en este proceso.
Además del oncólogo, suelen ser clave Cardiología, medicina rehabilitadora, nutrición y, según el caso, otros especialistas para garantizar seguimiento integral y seguro.